Le preguntaron en una ocasión a Boris Karloff si estaba agradecido al papel de montruo de Frankenstein. Y contestó: "Como profesional, si, porque me ha dado dinero. Pero como persona...", a lo que le reclamaron: "¿No le gusta?", y para terminar contestó: "No es que no me guste. Es que noto que hay alguien me da la mano y la retira. Como si quemara la mia".