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CRITICA
Por: PACO CASADO
El mundo del deporte ha sido frecuentado de vez en cuando por el cinematógrafo desde los tiempos dorados de Hollywood e incluso antes, y así se podrían citar algunos títulos memorables que han pasado a la historia de la gran pantalla, una veces elogiando figuras reales de cualquiera de las actividades deportivas, mientras que en ocasiones han sido personajes ideados para la ficción argumental.
La persona de la que se ocupa 'Born a champion' (2020) existió realmente.
Se trata de Mike Kelley, del que esta película nos da a conocer su actividad entre 1991 a 2001 de este soldado norteamericano, veterano de la Guerra del Golfo que estudió la especialidad de artes marciales del jiu-jitsu brasileño con Renzo Gracie que en un viaje a Dubai conoce a Leyla, a la que una vez allí libera de un magnate griego que la sojuzga.
El motivo del viaje es participar en un combate que pierde con malas artes de su competidor Marco Blaine.
A su vuelta busca a Layla y con el tiempo se casa con ella.
Se retira de competir y trabaja como portero de discoteca y dando clases de lo que mejor sabe hacer, pero le sigue picando el gusanillo de volver a subir al ring cuando se le ofrece la oportunidad de la revancha.
S u idea no es provocar peleas sino tener las suficientes habilidades de lucha para ayudar a acabarlas.
La historia que relata este film se ocupa de su amistad con Rosco su amigo y representante cuando llega la ocasión de hacer algún combate, así como la relación con su esposa Layla y su hijo Kid con los que se dan escenas muy tiernas, en contraste con la violencia que se ofrece en los combates de esta disciplina deportiva en la que se juegan fuertes cantidades de dinero por luchar de cuyos combates a veces se sale con graves lesiones físicas ya que casi todo está permitido en estos enfrentamientos.
Mickey Kelley, llegó a ser uno de los primeros cinturones negros norteamericanos en jiu-jitsu brasileño.
El guion de este film, que no tiene mucha acción ni excesivas peleas, está escrito por el director Alex Ranarivelo y el actor del mismo Sean Patrick Flanery, que a su vez este último asume el protagonismo en el papel de Micky Kelley, ya que al igual que el personaje que representa también es cinturón negro en esta especialidad de lucha de Jiu Jitsu brasileño, con lo cual le es fácil hacer los combates que se pueden ver en esta historia real.
A su lado encontramos a la guapa actriz Katrina Bouden en el papel de Layla, su esposa, y al veterano actor Dennis Quaid como Mason, un promotor de espectáculos deportivos, que fue antiguo compañero de Mikey en la escuela y al que le está agradecido por haber salvado a su hijo durante una acción bélica.
Alex Ranarivelo es un director nacido en Francia y criado en Nueva York y Los Angeles que ya lleva casi una decena de largometrajes realizados, varios de ellos de temas deportivos, como ocurre en este que comentamos.
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