30 Septiembre 2020.  La primera mujer que rodó documentales en la Italia de la posguerra y que aún hoy, con 93 años, sigue en activo como directora y fotógrafa.

                               


   Figura menos conocida de lo que correspondería a su lúcida y comprometida trayectoria como cineasta, el certamen reconocerá el talento y la sólida filmografía de Cecilia Mangini, referente del cine italiano y de la no ficción.

  El Festival de Sevilla estrenará su última película, Due scatole dimenticate (2020), codirigido por Paolo Pisanelli, con el que Cecilia Mangini recupera un viejo proyecto: imágenes de un viaje a Vietnam devastado por la guerra (1965). Más de medio siglo después, la directora regresó a estas imágenes casi por accidente, tras encontrar dos cajas de zapatos llenas de negativos.

  También se pondrá en marcha una Expo virtual de sus fotografías. Cecilia Mangini. 36 disparos. Primera exposición de su obra fotográfica en España. Dividida en cuatro series de instantáneas, que irán acompañadas con un audio de la propia cineasta, cada uno de los bloques tienen que ver con sus miradas a la vida en el sur y en el norte de Italia (miseria vs. boom económico); su experiencia en Vietnam; y su talento en el arte del retrato (gigantes del cine como Fellini, Chaplin, John Houston...).

  Sus comienzos fueron con Pasolini. Mangini llegó al cine a partir del encargo que le hizo a Pier Paolo Pasolini de unos textos que posteriormente ella convertiría en Ignoti alla città (1958), un corto documental que ponía imágenes a la preocupación del director por los jóvenes de la periferia y su mundo marginal. La colaboración con Pasolini se amplió más tarde con Stendalì (1960) y con La canta delle marane (1961). Tan desoladores como poéticos, los tres cortos se podrán ver junto a Facce (2018), Un viaggio a lipari (2017), Divino amore (1964) y Tommaso (1965).

  Mangini dedicó gran parte de su trabajo a mostrar la compleja transformación político-social de la Italia de posguerra, con una mirada especialmente preocupada por los más desfavorecidos, a los trabajadores de las fábricas y a las tradiciones ancestrales del campo, con títulos como Maria e i giorni (1959), La pasione del grano (1963), Essere done(1965), Tommaso (1965) o Sardegna (1965), que se podrán ver en este ciclo. Lo completan La scelta (1967) y La briglia sul collo (1974).