Título:	GRACE DE MÓNACO
Tit. Orig.:	GRACE OF MONACO
Nacionalidad:	BÉLGICA, FRANCIA, ITALIA, EE.UU., 2014
Dirección:	OLIVIER DAHAN
Guión:	ARASH AMEL
Fotografía:	ERIC GAUTIER
Música	CHRISTOPHER GUNNING
Interpretes:	NICOLE KIDMAN, PARKER POSEY, MILO VENTIMIGLIA, TIM ROTH, PAZ VEGA, DEREK JACOBI, FRANK LANGELLA, NICHOLAS FARRELL, ROGER ASHTON-GRIFFITHS
Censura:	NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 7 AÑOS
Duración:	103 MINUTOS

 Por  PACO CASADO

    Esta película fue la elegida para abrir el Festival de cine de Cannes 2014, fuera de competición, y pronto levantó la polémica primero por las desavenencias entre el director Oliver Daham y el productor Harvey Weinstein, al prevalecer el montaje hecho por este último, y la otra centrada en la vida de la actriz Grace Kelly convertida en princesa Gracia Patricia de Mónaco que fue rechazada por la familia.
 Por otro lado la casa real monaguesca pidió que no se hablara del film como un biopic ya que según ella la vida de la princesa fallecida en un accidente de tráfico en 1982 es inventada en la que Nicole Kidman encarna a la protagonista de cintas como 'La ventana indiscreta' (1954) o 'Atrapa a un ladrón' (1955).
 El film recoge algunos períodos de la vida de la actriz, de brillante carrera, que abandonó para contraer matrimonio con el Príncipe Rainiero III de Mónaco, en 1956.
 Alfred Hitchcock la quiso hacer volver al cine seis años después cuando el matrimonio atravesaba algunas dificultades para interpretar 'Marnie la ladrona' (1964), pero aunque estaba muy entusiasmada con el papel, al final decidió no hacerlo por salvar su matrimonio y por el bien de su pueblo.
 En esos momentos Francia trataba de anexionar Mónaco y ella se debatía entre su profesión y el principado.
 La cinta se inicia con la leyenda de que es "un relato de ficción basado en hechos reales", la cuestión tal vez estriba en hasta qué punto son verdaderos los que se muestran a lo largo del argumento.
 No obstante siempre hemos mantenido que las biografías cinematográficas son de los géneros más complicados y menos agradecidos de plasmar en celuloide y en este caso lo que se cuentan son unos hechos parciales, de unos años en la vida de Grace Kelly.
 La película comienza con el final del rodaje de 'Alta sociedad' (1956), de Charles Walters y a continuación un documental sobre la boda con el Príncipe Rainiero III de Mónaco y seis años después la visita de Alfred Hitchcock a Mónaco para ofrecerle el guion de Marnie.
 El resto del argumento se centra en las intrigas políticas de palacio en torno al acoso por parte de Francia con los impuesto y la amenaza de anexión del principado por la fuerza a cargo de Charles de Gaulle.
 Hay momentos en que parece un film de espías o un thriller político en torno a las intrigas por hacerse con el trono por parte de la hermana de Rainiero a cambio de caer en manos del país galo ocasionando una verdadera crisis internacional y también en la vida privada de Grace, que asumió así el papel más importante de su vida.
 A nuestro gusto se detiene demasiado en las cuestiones políticas, en cambio hay otros aspectos íntimos que no se tocan como el de madre y esposa.
 La cuestión se mezcla con algunos momentos de conocimiento del protocolo, del idioma francés y de confidencias de Grace con el padre Francis Tucker que le aconseja, al igual que a Rainiero, para terminar finalmente con el baile de la Cruz roja al que ella convoca a representantes de todos los países europeos, incluido Estados Unidos, en el que pronuncia un discurso decisivo para cerrar la crisis y salvar su matrimonio, que nos recuerda al de 'El gran dictador', de Charles Chaplin, salvando las distancias, por la emoción que pone en sus palabras y lo que en ellas se expresan.
 El reparto en muchos casos no está elegido por el físico de los actores con los personajes, caso de Rainiero, Nicole Kidman por momentos tiene algunos parecidos apoyándose en los peinados y vestuario y defendiendo dignamente el personaje, o Paz Vega con María Callas otros en cambio son menos conocidos y pueden pasar.
 La realización de Olivier Daham abusa a veces de los primerísimos planos.
  Las señoras disfrutarán con el vestuario y las joyas, pero cinematográficamente no acaba de convencer.

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 Producida por Carlos Reygada, Carlos Serrano Azcona, Jaime Rosales y Jaime Romandía, hace su ópera prima el guionista y director madrileño Carlos Serrano Azcona, que fue ayudante de dirección de Carlos Reygada en su primer largometraje, Japón.
Antes estudió Filosofía en la Universidad Complutense y dirección en la London Film School, pero poco aprovecharía el tiempo a juzgar por los resultados de su ópera prima.
 A la vista de quienes son los productores, del estilo de cine que suelen hacer, de la ayudantía de dirección con el que aprendió, no es de extrañar que el cine que lleva a cabo en su primera película este individuo sea exactamente igual que el de sus próceres, con las mismas características, de aburrido, de sin sentido, de sin argumento y de sin idea de lo que es el lenguaje cinematográfico en su afán de innovar o de epatar, siempre con la cámara a mano y pegada a la nuca del protagonista que deambula por las discotecas y las calles de noche, de día o duerme en un banco, sin la más mínima elipsis de tiempo.
 El protagonista se ha divorciado de su mujer pero quiere ver a sus hijas, cosa que tiene prohibido por ley y a pesar de ello se empeña en hacerlo. Ha trabajado fugazmente en la discoteca de un amigo pero es expulsado a las primeras de cambio y se vuelve a quedar en la calle sin nada que hacer. Termina acercándose a ver a su abogado que le vuelve a decir que no haga nada y acaba por querer tirarse de un puente y ahí se corta la historia, si es que a eso se le puede llamar así, que está mejor contada en estas cuatro líneas que en las insoportables imágenes de esto ya que no nos atrevemos a llamarle película.
 Esta misma técnica en las cintas de Reygada es aburrida, se ve crecer la hierba, observar íntegro un amanecer o una puesta de sol, pero al menos tiene una belleza que aquí no hay por ningún lado. Y se ponga como se ponga el director y sus patrocinadores esto es anticine, anticomercial y dudamos que encuentre quien lo estrene. Pasó por el Festival de San Sebastián en una de las secciones paralelas, que es donde se ha llegado a exhibir y los pocos que la vieron salieron echando pestes.