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CRITICA
Por: PACO CASADO
Cuando un género se agota no hay más que mezclarlo con otro y así, teóricamente, se deberían sumar los espectadores que gustan de ambos, y aunque no siempre sucede, algo se mejora.
Aquí se han unido por un lado el thriller, ya que el tema es el atraco a un furgón blindado que transporta dinero, pero por otro este traslado es debido a la catástrofe que producen las lluvias que desbordan un río, rompen una presa e inundan un pequeño pueblo que ha de ser evacuado para evitar que mueran ahogados sus habitantes. Esta circunstancia es la que aprovechan los ladrones de pisos y enseres. Así pocas personas quedan en el pueblo, entre ellas una restauradora de la iglesia del lugar que no quiere abandonar su obra de arte, con lo que ya tenemos también la heroína de la historia que, junto con uno de los ocupantes del furgón tratarán de salvar el dinero enfrentándose a los atracadores. Por medio estarán también el sheriff y sus ayudantes.
La verdad es que con esta breve introducción puede parece que está contado todo el argumento, pero en cierto modo esto no es más que el comienzo, ya que Graham Yost, el guionista de 'Speed', saca partido de una acción única, con algunos giros en el devenir de la historia y el comportamiento de los que intervienen en la misma.
A esto hay que añadir las acciones espectaculares motivadas por la catástrofe, intensas persecuciones entre los protagonistas, algo de suspense y sus gotitas de romance amoroso, para que nada falte, y tendremos un entretenimiento dirigido con corrección por Mikael Salomon, un realizador que debutó con Un lugar muy lejano proveniente del campo de la fotografía, entre otras de 'Abyss', por lo que ya tenía experiencia de rodar en el agua.
Los actores cumplen con sus cometidos, que no les ofrecen muchas dificultades, más que las provenientes de tener que actuar con el líquido elemento hasta la cintura y una pertinaz lluvia sobre sus cabezas.
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