Matteo Garrone, director que levantó una gran polémica con su título sobre la mafia, 'Gomorra' (2008), sobre el libro de Roberto Saviano, con el que ganó el Premio Europeo al mejor director, que pudimos ver en el Sevilla Festival de cine europeo, vuelve a esta sede con su nueva película 'Reality' (2012).
 En esta ocasión nos cuenta la historia de Luciano, un simpático pescadero que se gana la vida con su no muy rentable negocio que complementa con pequeños timos con unos robots de cocina, en lo que le ayuda su mujer y el empleado de su pescadería.
 Un día la familia, que es muy aficionada a ver la televisión, le ruega que se presente a un casting para entrar en el concurso de Gran hermano, a lo que accede, pero a partir de ahí su vida y su mente van a cambiar por completo.
 Con esta película Garrone ganó el Gran Premio del Jurado en el Festival de cine de Cannes 2012 y ahora entra en la sección oficial a concurso en el Sevilla Festival de cine europeo.
 Esta vez cambia de una producción con mucha acción, como era aquella, a una comedia que termina con tintes dramáticos, que protagoniza Aniello Arena, un actor que cumple condena de cadena perpetua, que obtuvo permiso para hacer este film.
 A diferencia de aquella esta vez no se basa en ninguna novela, sino en una historia real convenientemente adaptada para servir de base a esta cinta en la que reflexiona sobre la sociedad italiana actual, enganchada a los realitys show de la tele, con los que sueñan con la única intención de hacerse famoso y gozar del dinero que ello trae aparejado consigo, algo que no siempre consiguen, truncando los sueños de muchos, pero al menos mientras tanto se evaden de sus propios problemas reales.
 Es una manera distinta de ver la realidad, pero cuando estos programas influyen demasiado en la audiencia, se corre el peligro de alejarse de lo cotidiano adentrándose en la ficción, como le ocurre al protagonista de este relato, obsesionado con lograr lo que se ha propuesto, para de esa manera aparentar lo que no es.
 Lo importante en esta película es encontrar el equilibro entre el sueño, la esperanza de lograrlo y tratar de no despegarse de la vida nuestra de cada día.
 A través de esta especie de cuento fantástico del realismo mágico, pero bastante apegado al suelo en muchos momentos, Garrone trata de hacer una crítica de este sector de la sociedad, de esa clase social, que muchas veces hemos visto en las comedias italiana de antaño, pero acoplada a la realidad de hoy.