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    La franquicia de ‘Step Up’ empezó en 2006. Los productores Jennifer Gibgot y Adam Shankman han creado una serie deS cuentos de hadas megapopulares dedicados al hip-hop que mezclan el vértigo del último street dance con el romance al estilo de Romeo y Julieta. Cada nuevo capítulo de la franquicia ha superado al anterior con asombrosas coreografías.
  Con ‘Step Up Revolution’, la cuarta entrega de la serie, Gibgot y Shankmanun nos ponen en bandeja la película más que hayan hecho hasta la fecha, repleta con números que desafían las leyes de la gravedad y unos jóvenes intérpretes apasionados y rebosantes de talento. En esta ocasión los productores han introducido en la historia a un grupo de audaces artistas que forman La Peña. La Peña utiliza las calles de Miami con escenario de sus shows. Mezcla música, baile, artes visuales y la tecnología más puntera para ofrecer los flash mobs más alucinantes, espectáculos que aparecen y desaparecen en un instante.
  “Todos nos hemos movido alrededor del significado de 'flash mob'", dice el productor ejecutivo Matt Smith. “Se trata de un baile meticulosamente planeado y bien oreganizado que se realiza en público y que parece espontáneo. Se hace en directo y sobre la marcha. Así que hemos aprovechado al máximo esa sensación de 'que puede ocurrir cualquier cosa'. 
  Gibgot añade: "La magnitud y la ambición de los números de baile flash mob de la película no tienen precedentes”.
Llevar el baile a las calles de una gran metrópoli ofrece a la película unas posibilidades que la hacen muy diferente a los films anteriores, afirma Smith. “Estamos al aire libre frente a un público numerosísimo, en vez de un club como ocurría en las películas anteriores. Y eso es un nivel totalmente nuevo. Y a diferencia de la coreografía de un flash mob normal, que suele ser bastante rudimentaria, nosotros sacamos a la calle a los mejores bailarines del mundo que realizan esos números de baile tremendamente complicados en escenarios absolutamente sorprendentes".
  La franquicia ‘Step Up’ ya ha lanzado las carreras de dos directores de cine de enorme éxito: Anne Fletcher y John M. Chu. Para estar a la altura de une película tan creativa y trepidante, los productores de ‘Step Up Revolution’ contrataron a Scott Speer, un galardonado director que ha colaborado con él en ‘The LXD’, y que ha dirigido vídeos para Blake Shelton, Ashley Tisdale, Jordin Sparks y para Belinda, la sensación del pop mexicano.
  La productora Gibgot afirma: “Scott comprendió inmediatamente lo que necesitaba esta película. Trabajó incansablemente para que cada número fuera aún mayor que el anterior y dar a esta película una magnitud que superaba a las anteriores entregas de ‘Step Up’. Además, siempre estaba intentando superarse a sí mismo lo que fue una fuente de inspiración incalculable para el reparto y el equipo".
  Speer afirma que su visión se basó en la energía y audacia que desprende un flash mob. 
"La pasión que el realizador siente por el baile fue otro factor para convertirse en el director ideal de esta película", afirman los productores.
  Para fomentar el compañerismo entre los miembros del reparto, el director los animó a pasar tiempo dentro y fuera de los platós. "Una de las cosas más especiales de una película de baile es que no te reúnes en una mesa, lees y luego cada uno se va por su lado hasta que llega tu escena", explica el director. “El proceso de ensayos fue muy largo. Los miembros del reparto salían juntos después del trabajo y comían todos los días juntos. Así que el primer día de rodaje todo el mundo se conocía después de los meses de ensayos y entrenamiento. Empezó con la obligación de pasar tiempo juntos, pero después todos ellos se convirtieron en una pequeña familia".
  Hasta el productor Adam Shankman se ofreció para ayudar y dirigir la segunda unidad de Speer. “Adam aporta su enorme entusiasmo todo lo que hace", dice Smith.
  La película describe el mundo del flash mob de una forma nunca vista, dice el productor. “Es un viaje en el que veréis algunas de las mejores secuencias de baile del mundo. Y además también disfrutaréis de una historia de amor en la tradición de Step Up. ¡Os lo vais a pasar de cine!”.

BAILANDO EN LAS CALLES...
  Cada vez que Jennifer Gibgot y Adam Shankman han estrenado una nueva entrega de ‘Step Up’ se han asegurado que supera la energía, la diversidad y la complejidad del baile que se pudo ver en las anteriores. Pero con ‘Step Up Revolution’ han superado con creces todo lo anterior al reforzar la producción y al mostrar más estilos diferentes de baile que en las demás.
  “Desde el principio, para mí fue muy importante incluir todo el espectro del baile en esta película", afirma el director Scott Speer. “Creo que todo el mundo lleva un bailarín dentro. Al yuxtaponer los diferentes estilos, Speer está convencido que no sólo demuestra que funcionan bien todos juntos, sino que también resalta la fuerza de cada disciplina individual. “Son aún mejores cuando se compara a unos con otros", dice.
  Para aunar todos estos elementos, los productores volvieron a llamar a Jamal Sims, el prolífico actor, bailarín y coreógrafo que trabajó en las tres cintas. Gibgot afirma: "Su trabajo con nosotros siempre ha sido impecable. Estamos muy orgullosos de ver cómo ha progresado en su profesión".
  A Sims le animaron a que exprimiera al máximo su espíritu creativo. “Una buena parte de nuestro éxito reside en introducir nuevos estilos de baile en cada película", dice Sims.
  Los coreógrafos trabajaron intensamente para crear un look y un sentimiento único en cada uno de los números de baile. “Las escenas de flash mob están diseñadas para que sean independientes", dice Sims. “Cada una tiene su propia paleta de colores, su ubicación, su temática y su estilo musical. Son muy diferentes entre sí".
  Normalmente los flash mobs utilizan una coreografía que resulte fácil de aprender para todo el mundo, pero Sims aprovecho el enorme talento que tenía a su disposición. “Una persona normal, o incluso un bailarín normal, lo hubiera tenido muy difícil", dice Gibgot. “Había unas 60 personas, incluyendo artistas de parkour, que añadían aún más diversión".

HECHO EN MIAMI...
  La película ‘Step Up Revolution’ se rodó en su totalidad en las ciudades de Miami y Miami Beach aprovechando al máximo las fantásticas localizaciones del sur de Florida, desde los rascacielos ultramodernos y sus icónicas palmeras hasta los barrios étnicos y repletos de colorido, sin olvidar las tranquilas playas. “Ambientar la película en Miami fue una de las primeras decisiones que tomamos", dice Smith. “Es una ciudad americana pero también es una ciudad muy sexy con una gran cultura de baile. Así que era el lugar perfecto".
  La zona se reconoce inmediatamente por sus glamour, su juventud y sus contrastes y transmite la esencia de la película. “'Step Up Revolution' es una historia de amor ambientada en lo bueno y lo malo de Miami", dice Gibgot. 
  El clima suave de Miami y la cultura al aire libre ofrecen esas grandes panorámicas que los productores querían para situar los escenarios de los flash mobs.
  Carlos A. Menéndez, el diseñador de producción, nació en Miami y conoce y ama su ciudad natal así que le encantó presumir de ella en ‘Step Up Revolution’. “Miami es una ciudad mágica", afirma Menéndez. Y añade: "Su geografía es asombrosa. Está rodeada de agua. Hay un contraste muy interesante entre los sistemas de transporte y los puentes. Al Puerto de Miami llegan contenedores de todo el mundo así como cruceros que vienen y van. Y no se ven cielos como estos en ninguna parte. Las formaciones de nubles son espectaculares”.
  El diseñador tuvo que tener en cuenta que las cámaras de 3D tienen elementos añadidos que es necesario ocultar. "Crash tiene un estilo muy personal de iluminación. Es fantástico", dice. “Yo tengo un estilo de diseño definido. Lo trabajamos todos juntos. Había cámaras 3D con un montón de elementos, algo muy diferente a una película normal. Y me pasaba el tiempo intentando ocultarlos".
  Speer no había rodado nunca en 3D y está muy agradecido a Karsten y a Nick Brown, el estereógrafo de la película, por la ayuda que le prestaron. “Tuve que aprender a rodar de una forma diferente al 2D convencional", dice. "Pero tuve la suerte de contar con un equipo fantástico".
  El baile está hecho para el 3D, dice Brown, y los realizadores pudieron sacar el máximo provecho a ese efecto con un trabajo de cámara muy innovador.
  “Preparamos planos que aprovecharan al máximo la tecnología 3D", añade. "No se utiliza para hacer efectos de gags, como una mano pegada delante de la pantalla. Creamos momentos muy, pero que muy buenos. Loscoreógrafos tenían que crear bailes que tuvieran varias capas, para que lográramos un máximo de profundidad en el plano. Pero básicamente, ellos coreografiaban el número y nosotros imaginábamos la mejor forma de capturarlo en 3D utilizando las posiciones y los movimientos de las cámaras".
  A Gibgot le gustó muchísimo cómo quedaban los bailes en la pantalla. “Nunca creí que el baile quedara tan bien en 3D”, afirma. "Pudimos coger momentos concretos de la coreografía y utilizar el 3D y los bailarines para sublimar el efecto. ¡Está claro que es una experiencia maravillosa para los espectadoras!”
  A pesar de que ésta es su cuarta entrega de ‘Step Up’, Gibgot no se cansa nunca de decir que el compromiso y la capacidad de resistencia de los intérpretes es lo que hacen posible estas películas.

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