INFORMACIÓN EXCLUSIVA
Tras el éxito de “El tren de las 3:10” y “Wanted (Se busca)”, la pareja de guionistas Michael Brandt y Derek Haas andaban buscando un proyecto que permitiera a Brandt dirigir y a Hass producir, meta que se habían propuesto alcanzar hace 11 años, cuando lograron vender su primer guión.
“Nos encanta el proceso, nos encanta escribir y a mí desde luego me encanta dirigir, y me encanta tener a Hass produciendo a mi lado”, desvela Brandt sobre su primer proyecto, ‘La sombra de la traición’, en el que asumen labores que no son las habituales para ellos.
Para sus respectivos debuts en la dirección y la producción, Brandt y Haas, querían embarcarse en un ‘thriller’ sobre espías rusos y, al igual que en sus proyectos anteriores, se negaron a escribir juntos en la misma habitación. En vez de eso, se enviaban entre ellos los distintos borradores a través del correo electrónico.
El guión que tuvo muchos borradores se quedó atascado durante años en un estudio hasta que Brandt y Haas lograron recuperar los derechos sobre el mismo. Sin embargo, el acuerdo también establecía que disponían tan solo de un año para desarrollar la película, lo que les dejaba un margen bastante reducido para sacar adelante el proyecto.
Desde el primer momento, Brant y Haas querían hacer una película que resultara comercial, pero sin perder por ello verosimilitud y, aunque había muchas productoras interesadas en financiar la cinta, la mayoría pensaba que no se podía conseguir una producción de esa escala con su presupuesto.
Con el productor Amritraj ya implicado en el proyecto, decidieron enviar el guión inmediatamente a Richard Gere. “Fue el primer actor que nos planteamos y hablamos de él porque hay muy pocos actores de la edad adecuada para hacer esta película que puedan hacer dos cosas a la vez. Es una de esas personas de gran talento que es capaz de aportar a la vez intensidad y una calidez increíble”, explica Brandt sobre su elección principal para el papel de Paul Shepherdson.
Por suerte, Gere contaba con el mismo agente que Brandt y Haas como representante, y sobre la marcha le gustó el guión.
Elegir a alguien para el papel del joven agente del FBI Ben Geary resultó algo más complicado, ya que la persona que más interesaba a Brandt y Haas para interpretarlo era Topher Grace o, como les gusta referirse en broma a él, ‘Nopher’, porque la pareja de guionistas había oído que tenía fama de rechazar muchos proyectos. Sin embargo, este sería un proyecto que Grace no podría rechazar, sobre todo ante la perspectiva de trabajar con Gere.
Como tantos otros ‘thrillers’ de espionaje, ‘La sombra de la traición’ está ambientado en la capital de Estados Unidos aunque, a diferencia de sus predecesores, el filme muestra otros aspectos de Washington D.C. En vez de utilizar los monumentos y lugares más característicos de la ciudad, los realizadores decidieron mostrar el lado más turbio de D.C. “Es un poco más sucio, un poco más descuidado y en él se desarrolla una especie de pequeño juego de espías. Intentamos encontrar exteriores que le dieran un toque de autenticidad y realismo, como el camping de caravanas o el río Potomac”, comenta Haas sobre su decisión de desviarse de la norma habitual en ese tema.
Está claro que todo plató de rodaje tendrá sus momentos de especial estrés, pero Brandt y Haas han sorprendido a su reparto por su forma de llevar su primera película juntos, sobre todo teniendo en cuenta que algunos de ellos no habían trabajado nunca con estos realizadores primerizos.
Teniendo en cuenta las distintas labores que ha tenido que desempeñar en ‘La sombra de la traición’, Haas cree que la parte más gratificante ha sido alcanzar la meta que se habían propuesto cumplir hace 11 años: “Para nosotros, haber colaborado en la fase de escritura del guión, y en todo el proceso de preparación, para luego ver a [Michael] sacar esas interpretaciones a los actores, como productor ha resultado gratificante. Sin embargo, como su socio, ha sido mejor todavía”.