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CRITICA
Por: PACO CASADO
La acción comienza en Kabul, un 15 de agosto de 2021.
Las tropas norteamericanas se erigen en retirada de los territorios de Afganistán, mientras los talibanes marchan hacia la capital para hacerse con el poder.
En medio del caos, el comandante Mohamed Bida, al que todos conocen como Mo, jefe de seguridad con su equipo, es el encargado de la seguridad de aquellas personas que se encuentran refugiadas en la embajada francesa en la llamada Operación Apagan.
Esta misión consiste en negociar con los talibanes para organizar un convoy con 16 autobuses para que los deje marchar hacia el aeropuerto, que era una trampa mortal, ya que las carreteras eran un embudo y la supervivencia una prioridad.
La peligrosa misión no garantiza el éxito, ni la huida del infierno de Kabul, ni el rescate humanitario de los refugiados.
Hay que mencionar que el personaje de Eva, que encarna Lyna Koudri, es ficticio, pero el papel que los periodistas ejercen, contando lo que sucede, es fundamental en el mundo de hoy, ya que son como los ojos de la historia.
Por fin ha sido el cine francés el que se ha ocupado de poner en imágenes este suceso de agosto de 2021 en el que los talibanes entraron en Kabul al mismo tiempo que las tropas norteamericanas.
Muchos ciudadanos trataron de huir aterrorizados, sobre todo las mujeres, a las que los talibanes dejaron sin sus derechos en cuanto tomaron el poder.
Comenzó así una carrera contrarreloj para huir de ese infierno en el que se convirtió la ciudad de Kabul antes de que fuera demasiado tarde.
La película nos mete en ese infierno que vivieron los ciudadanos durante esos días del verano de 2021.
El protagonista, interpretado por el actor Roschy Zem, era cónsul en la embajada francesa en Afganistán, y decidió ponerse al frente de esta aventura, negociando con los talibanes que les cedieran 16 autobuses para transportar a centenares de personas salvando sus vidas en esa peligrosa evacuación, en la que el suspense se vive en cada momento en esas angustiosas horas como se aprecia en las imágenes, que se hacen interminables.
A su lado está siempre el personaje que interpreta Lyna Khoudri de una voluntaria de una ONG francesa, que busca a su madre, que le sirve de intérprete para entender a los talibanes en la negociación, que siente el miedo en su cuerpo por el simple hecho de ser mujer ante esos bárbaros.
En el reparto también tiene entrada la actriz danesa Sidse Babett Knudsen que interpreta a una valiente periodista que hace frente a los talibanes con riesgo de su propia vida para salvar a un grupo de artistas.
La dirección corre a cargo del realizador Martin Bouboulon, del que recordarán algunos de sus títulos como 'Eiffel' (2021) las dos partes de 'Los tres mosqueteros' (D'Artagnan) y (Milady) (2023), cuya historia se basa en el libro '13 días, 13 noches en el infierno de Kabul' escrito por el comandante Mohamed Bida sobre el tema, publicado en 2022, en el que se ha basado el guion, mientras que el director pone en imágenes con firme pulso esta historia real llena de heroicidad y valentía para ayudar a salvar a centenares de personas, co una recreación casi de carácter documental de los hechos, en la que mezclan lo espectacular con la intimidad.
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