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CRITICA
Por: PACO CASADO
Esta película inauguró la sección oficial a concurso del Festival de cine español de Málaga 2016 donde ha conseguido el premio del público.
Isabel pasa de los 40, es una mujer que se debate entre su necesidad de sentirse valorada como actriz, sus inseguridades, sus temores a envejecer, su coquetería femenina, sus contradicciones, su inteligencia y su ansiedad, que lo que más desea es obtener un papel en una película, ya que cree que no la contratan por ser demasiado mayor.
Todo sucede en una noche en la que Isabel es la anfitriona de una cena especial a la que asisten su marido Ángel, escritor de novela negra y guionista, y Susana, la ex mujer de Ángel, directora de cine, que quieren convencer al actor argentino Diego Peretti de que protagonice el film que han escrito.
En mitad de la velada, para sorpresa de todos, se produce una visita inesperada que da un vuelco al transcurso de la cena.
De pronto nada es lo que parece en una mezcla de ficción y realidad pasando de lo absurdo a que todo encaje y cobre sentido.
Además de retratar nuevos modelos de familia en la que los cónyuges tienen hijos con diferentes parejas, se muestra especialmente la relaciones entre los ex, con los consiguientes celos, rivalidades, problemas no resueltos, en una sátira que juega con los límites entre la realidad y la ficción, a través del humor negro, llevando al extremo a sus personajes que, aunque son personas educadas, sin embargo poco a poco van descubriendo sus debilidades, sus temores, su egoísmo, sus rencores, la soberbia, el orgullo, sus dudas con respecto a los demás, hasta terminar en una auténtica locura con momentos irónicos muy divertidos, ya que se da la circunstancia de que entre ellos han sido parejas pero ahora están divorciados y casados con las ex de los otros, lo que origina que siempre hay cuentas pendientes que hacen más complicadas las relaciones, aunque aparentemente se respetan y se llevan bien, hasta cierto punto.
La verdad es que el guion que han escrito entre la directora y Fernando Colomo tiene un aspecto de obra de teatro que asusta, por lo que muy bien se podría representar en los escenarios ya que prácticamente todo se desarrolla en el interior de una casa con los seis personajes relacionándose entre sí, que nos llevan de sorpresa en sorpresa con hilarantes situaciones.
La directora madrileña Inés París vuelve a la comedia con su cuarto largometraje tras 'A mi madre le gustan las mujeres' (2001), 'Semen, una historia de amor' (2004) y 'Miguel y William' (2007) con este simpático disparate que va increscendo hasta el desenlace final, con una estructura muy complicada ya que a la vez tiene el esquema y la intriga de un thriller que parece ideado por Agatha Christie o Alfred Hitchcock, ya que los líos y los equívocos se suceden sin solución de continuidad, muy necesarios en la comedia o el vodevil, con enredos amorosos, infidelidades, sexo, etc.
Pero al mismo tiempo es una sátira sobre los artistas y las preocupaciones de algunas actrices que se sienten marginadas por ser mayores frente a las más jóvenes y atractivas.
París, en sus cintas anteriores le da el máximo protagonismo a las mujeres y aquí no iba a ser menos ya que son ellas fundamentalmente las que llevan toda la acción de la trama.
En este sentido Belén Rueda que debuta en la comedia, María Pujalte siempre efectiva y Patricia Montero en un alocado personaje, están espléndidas en sus respectivos cometidos, así como Eduard Fernández desconocido en el género cómico, entre los actores, siguiéndoles en menor medida el resto del reparto.
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