| Título: |
VENGANZA |
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Tit. Orig.: |
TAKEN | |
| Nacionalidad: | FRANCIA, 2007 | |
| Dirección: | PIERRE MOREL |  |
| Guión: |
LUC BESSON, ROBERT MARK KAMEN |
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| Fotografía: |
MICHEL ABRAMOWICZ |
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| Música |
NATHANIEL MECHALY |
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| Interpretes: |
LIAM NEESON, MAGGIE GRACE, FAMKE JANSSEN, XANDER BERKELEY, LELAND ORSER, JON GRIES, KATIE CASSIDY, DAVID WARSHOFSKY, HOLLY VALANCE, OLIVIER RABAOURDIN, NATHAN RIPPY |
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| Censura: | NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 18 AÑOS | |
| Duración: |
96 MINUTOS |
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Por PACO CASADO
El director, productor y guionista francés Luc Besson se ha empeñado en hacerle la competencia al cine americano con sus películas de acción.
Últimamente se dedica a la producción y a escribir los guiones que da a otros directores para que los realicen, como ocurre en esta ocasión con Pierre Morel, su habitual director de fotografía, quien tras debutar con 'Distrito 13' (2004), un film de acción que tuvo gran éxito en Francia, reincide en esta ocasión en el mismo género para contar la historia de Bryan, un ex-agente del espionaje americano, ya retirado, que se ve obligado a volver a la acción cuando su adolescente hija Kim, con su amiga Amanda, se empeña en hacer un viaje a París y son secuestradas a su llegada.
Bryan pondrá en marcha todos sus conocimientos de hombre de acción para luchar en solitario y contra reloj, contra una peligrosa banda de mafiosos albaneses, especializada en la trata de blanca, que las han secuestrado para obligarlas a prostituirse.
El ex-agente sacará fuera toda su furia y sed de venganza para rastrear los bajos fondos de la ciudad y rescatar a su hija con vida, dejándose llevar por la violencia más desaforada que a veces se hace increíble.
El guion, escrito con su habitual colaborador Robert Mark Kamen, guionista de 'Transporter' (2002), acumula escenas de acción y persecuciones trepidantes, como es habitual en las cintas producidas por Luc Besson, en donde centra las secuencias más espectaculares y de mayor riesgo, en un esquema muy habitual de este tipo de producciones.
La película está llevada a cabo con cierto virtuosismo visual, interesante factura técnica y con un buen trabajo de Liam Neeson, un actor capaz de interpretar cualquier género, incluido el thriller, como demuestra en esta ocasión en su solitario personaje justiciero al margen de la ley, que se convierte en protagonista absoluto.
El film no tiene otra pretensión que la de distraer y eso lo logra con cierto estilo, bien planificado y con destellos de buen oficio por parte de Pierre Morel.
