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CRITICA
Por: PACO CASADO
A los distribuidores les ha dado en los últimos tiempos por no traducir los títulos originales de las películas y ponerle uno en español, todo lo contrario que antaño en que se abusaba de traducirlos mal o de otorgarles nombres que nada tenían que ver con el contenido del film, buscando solamente la comercialidad del mismo.
Esto perjudica a una cinta infantil como la presente, ya que no todo el mundo tiene conocimientos de inglés como para saber lo que significa.
En este caso es la aventura de unos niños que logran viajar desde Inglaterra a Estados Unidos a través del Arco Iris, pero la ambición de uno de ellos, hace que se quede con algunas piezas de oro que hay en su interior, que vende para comprarse la mejor moto del barrio y presumir con ella.
Esto trae consecuencias nefastas, ya que se deteriora la atmósfera y vuelve el entorno gris, sin color, convirtiendo a la ciudad en algo sin vida con el consiguiente malhumor e irritación de sus habitantes.
La historia es sencilla y trata de enseñarnos, a través de esta parábola fílmica, que debemos cuidar el medio ambiente pues de lo contrario nos veremos como los protagonistas de la película, malhumorados y viviendo en un mundo despersonalizado e inhabitable.
Cinta sencilla, realizada de forma funcional por el actor Bob Hoskins, sin actores de renombre, lo que merma también el atractivo de la misma, y con unos efectos especiales bastante toscos para los tiempos que corremos.
Se ve que no se ha contado con demasiados medios de producción. Y por otra parte los niños no se sienten muy atraídos por estos temas tan elementales pero interesantes al mismo tiempo.
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