Aquel señor, que acababa de conocer a Gary Cooper, le dijo: "Lo que más me gusta de usted es que no parece un actor fuera de la pantalla..." Y Gary Cooper, instantáneamente dice: "Ni en la pantalla. Por lo menos a eso aspiro". "Qué quiere decir", le espetaron, a lo que Cooper concluyó "Que en cada película hay que parecer un hombre bueno, un hombre malo o listo o torpe, lo que sea el personaje... Nunca un actor que está interpretando".